Tras el cruce de los Andes, la sexta etapa se proyectaba bordeando el Océano Pacífico. Sería el regreso a las etapas con características de larga extensión -1093 km- y con menos oscilaciones en el nivel tras abandonar Argentina.

La ruta, si bien continuaría siendo de ripio, el último tramo de entrada a Lima sería asfaltada. Todo en conjunto, prometía un tramo a mucha mayor velocidad de lo que había permitido la topografía del camino en las últimas etapas. De echo, ésta sería muy bien aprovechada por los pilotos que todavía tenían resto en sus motores para alcanzar grandes velocidades, o los que fueron precavidos y tenían preparada una multiplicación especial para las etapas de alta velocidad. 

Es por eso que luego de una decantación lógica del clasificador tras el cruce andino, muchos volvían a ganar posiciones mientras que otros, que en montaña se habían mostrado regulares, en esta etapa sufren una importante merma en la clasificación.

A las 6 de la mañana hora del Perú, partieron los competidores desde Arequipa en intervalos de 30 segundos. Estaban todos los clasificados hasta el último control menos Julio Devoto, que con motor herido de muerte desistía.

Oscar salió con todo para llegar antes que nadie a Lima. Aproximadamente, en el kilómetro 200, estaba puntero a más de cuatro minutos de su hermano Juan, mientras Fangio, ya había superado en tiempo 21 máquinas y estaba octavo. 

Por Ocaña, cumpliendo ya 465 km de recorrido, El Chueco estaba quinto en el camino y segundo por tiempo neto en la clasificación. Juan pasaba al tercer lugar y Marimón quedaba cuarto. A esa altura, Oscar había empleado 4:26’ exactos, Fangio 4:33’30”, Juan Gálvez y Marimón en 4:36’30”, H. Bradley 4:39’, Bojanich 4:52’30” y Victor García en 4:53’
Antes de entrar en Nazca, un palier se corta en el Chevrolet de Fangio. La rueda “los supera” y el balcarceño sufre un despiste a causa de la velocidad que estaba desarrollando, sin consecuencias graves. Luego podría continuar pero sufriendo un importante retraso y perdiendo todo lo ganado.
Casi en el mismo lugar abandona el chileno Jorge Rodrigo Daly. 

Oscar seguía su arremetida superando promedios en algunos tramos de más de 150 Km/h mientras Gulle iba perdiendo mucho terreno.

El piloto chileno Fouilloux sufría un accidente que lo postergaría a llegar en la 26º posición del día tras estar corriendo entre los primeros lugares.

La localidad de Limatambo, a menos de diez kilómetros de Lima, se juntaron 25 mil almas para ver llegar al primero.

La gente vio la llegada triunfal de Oscar Gálvez, y en segunda colocación, -tercero en el camino-para la alegría de los locales, al peruano Arnaldo Alvarado finalizando su mejor trabajo desde la partida de Buenos Aires.

Fangio entraría en la 13º posición, a más de una hora del vencedor. El promedio de Oscar sería de algo mas de 112 Km/h tras un recorrido de casi 1100 km. Mejoró el tiempo logrado por Fangio en el año 1940 en la general, por mas de tres horas.

Abandonaron en esta etapa: Emilio Karstulovic, Jorge Rodrigo Daly, Adolfo Fernández, Atilio Cagnasso, Antonio Zarantonello, Félix Palacios y Victor Roude.

Hay que mencionar que los 5000 kilómetros recorridos se hacían sentir en el clasificador. Fueron varios los pilotos que hasta Arequipa habían sido muy regulares y tras ésta etapa de pura velocidad sufrieron drásticas caídas del rendimiento. Otros, que durante la primera parte de la etapa pelearon los primeros lugares, finalizaron luego muy retrasados en el clasificador. 

Resumiendo, Alberto Fouilloux había sufrido un accidente que le hizo perder casi una hora hasta volver a la carrera. Pablo Gulle, entra muy retrasado, en el puesto 52 de la etapa, mientras Henry Bradley llegó a pelear el cuarto lugar y terminó en el 55º. Arturo Kruuse, otro de los animadores regulares que tuvo problemas… y finaliza 47. Además, José Rubiol Roca, llega en el 60º lugar.

Por otro lado, Lorenzo Varoli demostraba que a pesar de estar regulando su marcha desde hacía varias etapas –había dejado de correr al ritmo de los punteros para cuidar su Ford- seguía ganando posiciones en el clasificador. Recuperaba su excelente cuarto lugar  a tres horas de Oscar Gálvez.

Otro que se destacó este día fue Manuel Merino, quien realizó su mejor trabajo hasta este momento con su octavo lugar en la etapa.

El jueves 28 de octubre, sería día oficial de descanso. El parque cerrado se abría durante ocho horas para que los pilotos-mecánicos pudieran hacer todas las reparaciones necesarias de sus maquinas. -Los pilotos por reglamento tenían una hora los días que corrían y ocho horas los días de descanso-.

Fangio le contaría a Roberto Carozzo:
-Nosotros, por lo general, arreglábamos tres coches: el de Marcilla, el de Marimón y el mío. Sin un orden establecido, cualquiera, porque teníamos una hora de reparación por auto. Trabajamos con los tres y cuando terminamos nos fuimos a dar un baño, comimos una cosita liviana y nos fuimos a acostar, porque a las cinco de la mañana nos largaban hacia Tumbes. Pero no dormimos mucho. A las 20, más o menos, golpean la puerta de la habitación, y nos dicen que nos iban a largar a las 22, porque había una revolución…

UTaC Team.

El día anterior los supervivientes habían realizado un trayecto de más de 1000 km, el cual había enlazado Arequipa con la capital peruana. Es allí donde, de forma más que merecida, les esperaba una jornada de descanso para favorecer el reposo de mentes y mecánicas: los pilotos disponían de todo el jueves 28 de octubre; mientras, los coches gozaban de ocho horas de parque cerrado abierto para ser reacondicionados. 

En 1945 José Luis Bustamante y Rivero –escritor, abogado y político nacido un 15/I/1894– ganó las elecciones para ser Presidente de la República Peruana. Se trataba del candidato del Frente Democrático Federal, quien finalmente el 28 de julio asumió el cargo. Para ello había sido necesaria la coalición con otro partido, la Alianza Popular Revolucionaria Americana –el APRA–. 

El también conocido como ‘Partido Aprista’, fundado por Víctor Raúl Haya de la Torre, tuvo desde su creación objetivos como la unión de los pueblos latinoamericanos, la defensa de las clases oprimidas o la lucha en contra del imperialismo norteamericano. 

Ese pacto inicial con el APRA, que permitió la consagración de Bustamente como líder de Perú, poco a poco fue degradándose. Importantes desacuerdos entre éste y Haya de la Torre –recordemos, fundador aprista– terminaron con la disolución por parte del presidente de su gabinete del APRA. Posteriormente se engendró, en substitución, otro gabinete de origen militar pero de carácter antagónico: su principal impulsor era el general Manuel Apolinario Odría Amoretti –Tarma, 26/XI/1896–, claro oponente al movimiento aprista. Éste último lentamente fue ganándose la confianza del presidente, sobretodo desde que pudo ocupar la privilegiada plaza de Ministro de Gobierno y de la Policía. 

Llegados a este punto, en 1948 el mismo Odría se encargó de recomendar a Bustamente que vetara el APRA. El Presidente, no obstante, no vaciló en ningún instante rehusando sin piedad la propuesta del general. Ésta fue la cuestión discordante entre ambas figuras, quienes desde entonces se enfrentarían para conseguir la hegemonía del Perú. 

Con este clima político –y, a la vez, social– tan tenso y candente llegaron nuestros protagonistas automovilistas a la conocida como ‘Ciudad de los Reyes’.

Con la caravana del Gran Premio en Lima, los rumores del alzamiento militar fueron acrecentándose. Las tropas del general Odría empezaban a moverse por franjas del sur de la capital. Obviamente la organización de la popularmente conocida como ‘Caracas’ tuvo que actuar con el fin de sortear el conflicto bélico. Aún estaba empezando a anochecer, de modo que aquellas horas de impás hasta el inicio del séptimo tramo podrían hacerse eternas. 

Todos estos acontecimientos desembocaron en la decisión, por parte de las autoridades de la carrera, de cambiar la programación hasta entonces existente: por una parte se cambiaría el punto de inicio del recorrido –inicialmente en la misma capital–; por otra, se adelantarían los horarios. 

A las 22.00 horas del jueves 28 de octubre la organización anunció a los sesenta y seis supervivientes, recorriendo cada uno de sus alojamientos, que la competición se reanudaría durante esa misma madrugada. Cuentan los cronistas que, mientras los pilotos y demás componentes de la caravana se apresuraban para recoger sus posesiones, en las afueras de la ciudad ya se escuchaban los disparos producto de los enfrentamientos entre las tropas leales al gobierno democrático y las adictas al militar Odría. 

En plena medianoche, nuestros protagonistas se dirigieron hacia el parque cerrado donde permanecían guardados sus coches. Desde allí, los pilotos los condujeron a lo largo de 22 kilómetros hasta Puente de Piedra, a las afueras de Lima. 

Es a las dos de la mañana del viernes 29 de octubre de 1948 cuando se dio por reiniciada la marcha. De forma desordenada, con intervalos de diez segundos –que pocos participantes respetaron–, éstos fueron marchando de esa ciudad por momentos más y más peligrosa. Les esperaba un trayecto de más de 1300 kilómetros hasta llegar a Tumbes, y es que resultó ser una de las etapas más largas de la aventura. Agotados, con falta de sueño, emprendieron un viaje largo, farragoso y extenuante. 

Mientras, en la ‘Ciudad de los Reyes’, se estaban gestando cambios trascendentales. Aquel viernes 29 de octubre de 1948 los peruanos observaron atónitos como la Presidencia de su país pasó de unas manos a otras: se trata de la transición entre José Luis Pablo Bustamante y Rivero –antiguo Presidente Constitucional de la República– y Manuel Apolinario Odría Amoretti –nuevo Presidente Provisorio de la República–. Esta provisionalidad tan sólo duró cuarenta y ocho horas, las suficientes como para autoproclamarse Presidente de la Junta Militar de Gobierno.

Narcís Molina Montasell, UTaC Team.

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Capitulo 01 - La epopeya sudamericana.
Capitulo 02 - Los inscriptos
Capitulo 03 - 1º Etapa Buenos Aires - Salta
Capitulo 04 - 2º Etapa Salta - La Quiaca
Capitulo 05 - 3º Etapa Villazón - Potosí
Capitulo 06 - 4º Etapa Potosí - La Paz
Capitulo 07 - 5º Etapa La Paz - Arequipa
Capitulo 08 - 6º Etapa Arequipa - Lima
Capitulo 09 - 7º Etapa Lima - Tumbes
Capitulo 10 - 8º Etapa Guayaquil - Quito
Capitulo 11 - 9º Etapa Quito - Pasto
Capitulo 12 - 10º Etapa Pasto - Calí
Capitulo 13 - 11º Etapa Calí - Bogotá
Capitulo 14 - 12º Etapa Bogotá - Cúcuta
Capitulo 15 - 13º Etapa Cúcuta - Valera
Capitulo 16 - 14º Etapa Valera - Caracas
Capitulo 17 - Clasificaciones detalladas B. Aires-Caracas
Capitulo 18 - Epilogo.

UTaC Team.